Sunday, December 16, 2007

 

amsterdam


En una de las mejores decisiones que se recuerdan últimamente a nivel de integración y acciones 360º, este año han unido en el trabajo 4 conceptos habitualmente incómodos durante estas fechas (convención/amigo invisible/cena navidad/regalo navidad) y con todo eso junto y combinado, nos hemos ido un par de días a Amsterdam y hemos solucionado todo allí con gran criterio

Vaya por delante que yo siempre he creído que las convenciones son un mal necesario, pero a mí me dan pereza los diez primeros minutos, luego una vez metidos en harina, de perdidos a los canales.

Así que aparecimos en Amsterdam previo paso por un entrañable pueblo de pescadores que de tan bonito que era, me acabó pareciendo horrible y cuyo nombre no recuerdo ni falta que hace. Yo es que soy más de capitales.

Una vez registrados en el hotel, salí a dar una vuelta con el típico grupo heterogéneo que se montan en las convenciones, que yo soy muy obediente e intento integrarme al máximo. Pues nada, ponle que si hicimos el check in a las 17.00, a las 17.07 ya estábamos en el barrio rojo viendo el tema de las putas (quería hacer aquí un circunloquio, pero es que no se me ocurre nada mejor).
Qué impresión, tú.

Pero bueno, a la mayoría se las veía con sonrisa winner, así que no vamos a indagar en las razones por las que unas chicas tan guapas y con idiomas están metidas en esas cabinas deprimentes con calefactor y cortinilla delatora.


Por lo demás,
en el amigo invisible salí super bien parado con un libro guapo de cine -tapas duras, incluso-, pero volvió a haber grandes batacazos. Hay que marcar unos mínimos con esto.

Por la noche estuvimos en el Supperclub, típico local modercool en el que no me ubico hasta pasada la primera hora. Al entrar, aquello era como un sofá gigante en el que había que acomodarse para la cena. Efectivamente, tanta comodidad incómoda hacía presagiar que íbamos a cenar bastante poco, como así fue, por lo que entramos en modo copas hasta que pudimos aguantar. Pero vamos, que muy bien y risas totales.


Qué mes Diciembre, tú, esto es como el "Corre tú que a mí me da la risa" que soltó en su día Vicente del Bosque.

Comments:
Jo Charly, te pega menos el barrio rojo que Gullón un coche tuneado.
 
Cuidao, Charly, que menos te pegaba ir de vacaciones a Cádiz y mira.
Todo es empezar...
 
¿Has tenido algo que ver?

http://www.elmundo.es/elmundo/2007/12/17/internacional/1197893840.html
 
qué va, qué va, pero ya he visto el link...
 
Eso son cenas de empresa, y lo demas gilipolleces...
 
eso es una empresa coño!
allí que tal de cheescakes?
 
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